Queremos ser. Tu lugar. El encuentro. Un cafetín. La birra. El vermú. Un nuevo centro. Barrio. Mil platitos. La felicidad. Queremos barullo, sanguchitos, lio.
Queremos ser. Un hogar. Un club. Un lugar de encuentro. Un lugar remoto, cercano, íntimo. Sobremesa. Barra. Pasaje. Pasadizo. No un lugar más. No una ilusión. No una escenografía. Tenemos un sueño. Muchos sueños. Atender, servir, celebrar, brindar. Perder el tiempo. Encontrar lo que perdimos. Crear lo que no queremos perder. Creamos un lugar, no lo abrimos. Lo tallamos como a una cueva luminosa. Somos un deseo, que creció por años en silencio. Una epopeya familiar. Un lugar construido con nuestras manos. Una leyenda de las que nadie nunca nada. Una en la que ponemos todo. Un bar. Un café. Un lugar para morfar. Un paseo, un vermut al paso, una escapada. Un rato cualquier día. Un compromiso. Una cita. Una mesa grande y compartida. Un cielo en el patio, un sótano en silencio. Un paisaje en el fondo del vaso. Un oráculo inventado. Una silla, una banqueta, una promesa.
Queremos ser lo que hacen de nosotros. Lo que deseamos y construimos. Lo que descubrimos todos los días. Lo nuevo que nos apasiona, lo pasado que atesoramos. Queremos ser tu lugar. El encuentro en el café, la birra, el vermú. La felicidad. Un montón de cosas que no tienen tanta importancia. Un rato en la historia. Un desliz en cualquier momento. Una chispa en la memoria. Una foto que no borras. Un lugar al que volvés.
Un lugar en Rosario. Argentina. En tu mapa.
Queremos ser.